Deformidades craneales en niños
La deformidad craneal es muy frecuente en recién nacidos y lactantes. El diagnóstico realizado por un neurocirujano pediátrico permite distinguir las deformidades posturales (por el apoyo inadecuado de la cabeza) de las craneosinostosis verdaderas causadas por el cierre prematuro de una o más suturas del cráneo que necesitan tratamiento quirúrgico.
Plagiocefalia postural
Es la deformidad craneal postural más frecuente en pediatría. Se caracteriza por aplanamiento occipital unilateral con abobamiento frontal del mismo lado que puede ir acompañado de desplazamiento del pabellón auricular hacia delante y asimetría facial. La causa más frecuente es la torticolis del recién nacido con el apoyo persistente de la cabeza sobre el mismo lado.

Ejemplo de plagiocefalia postural con aplanamiento occipital derecho ,desplazamiento de la oreja y abombamiento de la región frontal derecha.
Tratamiento
En algunos pacientes el tratamiento se realiza con cambios posturales y ejercicios para la torticolis sin embargo en otros casos necesitará un casco para corregir la deformidad.
Todos los pacientes con deformidad importante deben ser valorados por un neurocirujano pediátrico en la consulta de neurocirugía.
Craneosinostosis
La craneosinostosis es un defecto congénito en el cual una o más suturas (unión entre los huesos craneales) que unen los huesos del cráneo del bebé se cierran antes del tiempo. En las craneosinostosis el cerebro no dejará de crecer, sin embargo la cabeza se irá deformando progresivamente en los primeros meses de vida.
Existen muchos tipos de craneosinostosis. La mayoría consiste en la fusión de una sola sutura. Algunas formas complejas de craneosinostosis implican la fusión de múltiples suturas. La mayoría de los casos de craneosinostosis de sutura múltiple están relacionados con síndromes genéticos y se denominan craneosinostosis sindrómica.
Tratamiento
El tratamiento de las craneosinostosis es quirúrgico y consiste en la abertura de las suturas. La cirugía deberá ser realizado preferentemente por un neurocirujano pediátrico.
El Dr. Budke actualmente utiliza técnicas mínimamente invasivas con endoscopia realizando pequeñas incisiones cutáneas con reducción del tiempo quirúrgico y mínimas cicatrices.
Tipos de craneosinostosis
El término dado a cada tipo de craneosinostosis depende de cuáles son las suturas cerradas. Los tipos de craneosinostosis más frecuentes son:
- Sutura Sagital (escafocefalia).
La fusión prematura de la sutura sagital que se localiza en la parte superior del cráneo en la línea media. La craneosinostosis sagital tiene como consecuencia una deformidad craneal con la cabeza alargada, estrecha y con la frente abombada. La escafocefalia y la forma más común de craneosinostosis.
- Sutura Coronal (plagiocefalia anterior).
La fusión prematura de una de las suturas coronales (unicoronales) que van desde parte anterior a la oreja hasta la parte superior del cráneo.
La plagiocefalia anterior provoca una deformedad facial importante con hundimiento de la zona frontal y desviación de la nariz. Cuando ambas suturas coronales se cierran prematuramente (bicoronales), la cabeza tiene una apariencia de torre (turricefalia) corta y ancha, a menudo con la frente inclinada hacia adelante.
- Sutura Metópica (trigonocefalia).
La sutura metópica va desde la parte superior del puente de la nariz hasta la fontanela anterior y la sutura sagital. La fusión prematura cauda una deformidad craneal con la frente en forma de triángulo con una cresta y se ensancha en la parte posterior de la cabeza.
- Sutura Lambdoidea (plagiocefalia posterior no postural).
El cierre precoz de la sutura en la zona posterior de la cabeza (sutura lambdoidea) es un tipo de craneosinostosis poco frecuente y causa una deformidad en la zona occipital de cráneo en que la parte superior de la cabeza se incline hacia un lado con una retracción posterior de la oreja.

Ejemplo de lactante de 3 meses con escafocefalia.

Tumores cerebrales
Los tumores cerebrales son los más frecuentes en los niños después de las leucemias. Si bien pueden aparecer a cualquier edad, son mucho más frecuentes entre los 3 y los 8 años. Como sucede en la mayoría de los cánceres, los factores que llevan a su aparición no son conocidos. Existen algunos síndromes en los que la frecuencia de tumores cerebrales es muy alta, como las neurofibromatosis, la enfermedad de von Hippel-Lindau, y otros síndromes
Síntomas
Los síntomas de los tumores cerebrales en niños dependen de la velocidad de la localización del tumor, el tamaño del tumor y la presencia de Hidrocefalia. Los síntomas más frecuentes son:
Dolor de cabeza (cefalea). Suele ser el síntoma más frecuente. Es más intenso por la mañana y no responde adecuadamente a la toma de analgésicos. A veces se asocia a vómitos.
Alteraciones en el nivel de conciencia con tendencia al sueño.
Alteraciones del equilibrio.
Alteraciones en la visión o visión borrosa.
Crisis epilépticas.
Pérdida de fuerza en un brazo, en una pierna, en una mitad del cuerpo, imposibilidad para hablar, etc.) o sensitiva (hormigueos en un brazo o en una pierna).
Tratamiento
El tratamiento de los tumores cerebrales se realiza en función del tipo de tumor. Los tratamientos más frecuentes son la cirugía para extirpar el tumor, la radioterapia y la quimioterapia. En general en niños muy pequeños no suele utilizarse radioterapia dado que puede afectar el desarrollo cerebral.
Es muy importante acudir a un centro con neurocirujanos pediátricos y oncólogos con experiencia en tumores pediátricos para elegir el mejor tratamiento en cada caso.
Diagnóstico
El diagnóstico de los tumores cerebrales en pacientes pediátricos es realizado con una prueba de imagen para visualizar el tumor dentro del cerebro. La Resonancia Magnética en la prueba de elección para diagnosticar los tumores cerebrales.

Tipos de tumores cerebrales más frecuentes en edad pediátrica
Meduloblastoma. Es el tumor cerebral maligno más frecuente en niños. Aparece casi siempre antes de los 10 años de edad, se localiza en dentro del cerebelo en el cuarto ventrículo y habitualmente causa Hidrocefalia por obstrucción de la circulación del líquido céfalo-raquídeo en el cerebro. Se presenta como dolor de cabeza, dificultad para el equilibrio, disminución de la atención o tendencia al sueño.
Craneofaringiomas. Son tumores benignos, de crecimiento lento que afectan a niños o a personas mayores de 50 años. Producen dolor de cabeza, alteraciones de la visión y, en niños, alteraciones del crecimiento dado que pueden afectar a la producción de determinadas hormonas cerebrales.
Astrocitomas. En niños y jóvenes suelen ser astrocitomas pilocíticos localizados en el hemisferio cerebeloso de bajo grado de malignidad.
Gliomas de tronco del encéfalo. Suelen aparecer alrededor de los 6 años. En general no producen síntomas hasta que su tamaño es muy grande. Son muy difíciles de curar y el glioma pontino difuso tiene un peor pronóstico.
Ependimomas. Son tumores más frecuentes en niños, sin ermbargo puede ocurrir en adultos adultos. Se localizan preferentemente en el cerebelo y obstruyen el paso de líquido cefalorraquídeo dando lugar a una hidrocefalia.